De: La Frikipedia, la enciclopedia extremadamente seria.
Médico de familia (Family Matters) fue la primera telecomedia de éxito de origen español, creada y protagonizada por el aclamado Emilio Aragón. La serie, que en un principio fue altamente criticada por altos cargos de bandas armadas irlandesas, tuvo una gran aceptación entre el público más regulero, propiciado este éxito por sus diálogos soeces y las continuas tensiones familiares (sólido retrato de la sociedad española de finales del siglo XX).
La familia que se reúne a las siete de la mañana para tomar el desayuno con una alegría en el cuerpo y un buen rollo... yo a las siete no soy persona...ni yo ni nadie. y le veías a él en la serie "¡Buenos días, familia! ¡Hoy va a ser un día estupendo, me voy a trabajar a la consulta que tengo ganas de curar a mis pacientes!"... ¡Esa es otra, ! , ¡Nacho Martín era el único médico de la seguridad social que trataba a sus pacientes como personas!, llegaba ahí "Buenas ¿qué le pasa?" "Es que llevo dos días con un catarrillo..." "Bien, vamos a hacer un análisis exhaustivo, túmbese ahí e indíqueme los síntomas, ¿ha tenido antecedentes catarrales en su familia? Pruebe con esto y vuelva las veces que quiera, siempre que a usted le duela lo más mínimo sepa que me tiene a su completa disposición porque yo, aparte de su médico, soy su mejor amigo... aunque las comparaciones son odiosas , comparas con como te tratan a tí en los ambulatorios y flipas, llegas ahí con cuarenta de fiebre "déme algo doctor, tengo una gripe que te cagas , se me están desprendiendo las retinas, apenas puedo respirar" y el médico "Tómese una aspirina que tenga por casa y vaya a tocar los cojones a su padre"... Definitivamente el estilo Nacho Martín no ha creado escuela en los medicos españoles.
Nunca olvidaré esos episodios en que el niño, el mítico Chechu . Este se tomaba dos cervecitas y pillaba una borrachera que ni Ernesto de Hannover en un día malo y que luego venía Nacho Martín con tono solemne "Chechu el alcohol es malo, no hagas como esos sucios hippies del botellón y deja la cerveza antes de que sea demasiado tarde, la cerveza puede destruir tu vida y yo debería castigarte dos meses sin salir, pero te perdonaré si vas a tu cuarto a pensar ( traducción : te voy a zurrar más que al put chin ball de Mike Tyson , pero su abuelo le introduciría en el mundo de las drogas más tarde . Y otro capítulo mítico en que a la niña (que por entonces tendría unos quince años) empezaba a molarle un chaval "Ay, me gusta Raúl, es tan guapo..." y comenzaban a tontear, ya saben "ay, que si nos hemos encontrado, qué casualidad, , que si tú me estás siguiendo, ¡no, que eres tú el que me sigue! ," hasta que al final el Raúl este se arma de valor y le dice "Esta noche voy a ir a pasear por el parque, nena, si te apetece verme... estaré allí". A las ocho quedan en el parque y a los cinco minutos el Raúl que iba muy quemao empieza a querer temita, pero ella responde apartándole y gritando como una posesa como si el otro la hubiera matao "Ay, fuera, apártate ¡Me das asco!"... Ya ven amigos, ella que 5 minutos antes cuando pensaba en el otro se le estaba haciendo el chichi calderilla, ahora cuando por fin le da un par de besitos le aparta como si fuera el violador de Boston. ( eso en mi pueblo se llama calienta pollas ).
Luego claro, alarmado por los gritos llegaba Nacho Martín y decía "Oh hija mía, menos mal que te he salvado, eso te pasa por quedar con hombres a solas, no lo hagas nunca más, tienes que ser virgen para siempre y tú Raúl, pobre descarriado, apártate de mi hija, debería darte vergüenza esa obsesión sexual enfermiza, ahora mismo llamaré a tus padres para que te ingresen en un reformatorio. La niña se va con su padre con carita de víctima y Raúl se va para casa con cara de cordero degollado con una expresión en la que cualquier observador imparcial puede leer en su mente la frase "En cuanto cumpla los dieciocho me voy al Riviera y fuera problemas". Ese capítulo, aunque no se lo crean, quedó grabado a fuego en la mente de muchos jóvenes de nuestra generación, como podemos comprobar con gran tristeza cada fin de semana. Pese a todo, mejor series como Médico de familia a otras opciones. Pero todo esto era de cara a la galería, a contiunación sacaremos los trapos sucios de la familia Martín.
Al parecer, Chechu murió de sobredosis. El abuelo , que tenía mono, consumió la droga del ya muerto, dándose cuenta que estaba realmente adulterada y pereciendo en el embite casi en el acto .
Algunos enemigos de la serie y de sus personajes lo estarán ya celebrando con cerveza en mano y matasuegra en boca, pero la noticia es súmamente tristísima. Sus cadáveres serán mostrados los próximos días en la plaza del pueblo como solución para que no ocurra más, vaya. Los recordaremos, serán días duros, ya no podremos escuchar más eso de Chechuuuuu.
En un arrebato de locura tira a su hermana pequeña a un pozo, la cual tarda en morir de hambre a los siete días.
En definitiva , La serie trataba de las aventuras y desventuras de Nachete (Emilio Aragón), un típico médico cachas que las trae a todas de calle. Entre los capítulos que están grabados a fuego en las memorias de todos aquellos que siguieron la serie se encuentran:
Médico de Familia" era una serie mala, aburrida ,blanda, cursi, pija, clasista, ñoña, estúpida, pastelosa, moralista (en el peor sentido de la palabra), políticamente correctísima (lo que la hacía más repugnante aún), edulcorada, conservadora hasta la náusea, boba, con actores malísimos ( Pedro Peña y Luisa Martín, te taladabran los oídos con tanto berrido), Emilio Aragón, Lydia Bosch y los repelentes niños a la cabeza de todo el penoso reparto, tramas imposibles, guiones sin ritmo ni puta gracia y un tufo a serie "superguay del paraguay" para niñatos de clase media alta que tiraba de espaldas. Era un auténtico culebrón, los mensajitos moralizantes "para toda la familia" daban pena, se retrataba a la gente de clase media baja como auténticos palurdos (y si encima eran andaluces ya ni te cuento), los personajes principales eran lo más en sofisticación y pijerío, había actores que no lo podían hacer peor... Sólo recomiendo ver esta serie cuando se quiera pasar un mal rato.
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